LAS CASAS DE POMPEYA
La casa pompeyana es la casa romana típica y sólo está ocupada por una familia. Se encuentra orientada hacia el interior. Tanto el aire como la luz entran por las dos áreas centrales en torno a las cuales se encuentran el resto de las estancias; es decir por el atrio y por el peristilo. Para distinguir los diferentes tipos de casas pompeyanas, tenemos que tener en cuenta tanto sus dimensiones como el número de peristilos.
Las ventanas son muy escasas y la mayoría de las veces dan al interior, son irregulares y poco espaciosas. Las casas pompeyanas, a diferencia de las romanas tiene 1 SOLO PISO...
Existen varios tipos de atrios:
- Tuscanicum: Cuando no tiene columnas y por lo tanto el peso del techo es sostenido tan solo por vigas.
- Tetrastilum: Tiene una sola columna en cada uno de los cuatro ángulos del IMPLUVIUM
. - Corinthium: Es semejante a la anterior, sólo que hay un mayor número de columnas y tiene más luz.
Dependiendo del número de peristilos las casas de pompeya tienen unas dimensiones u otras y se clasifican en diferentes tipos: las casas más sencillas eran las que sólo tenían un peristilo; el segundo tipo eran casas más amplias y con dos peristilos y también se sabe que conforme fueron mejorándose, cuando el comedor no cabía en la planta baja se hacía una planta más y, por lo tanto, se ponía en la segunda planta. Las casas aumentaban a lo largo y no por pisos como ocurría en Roma; excepto con el último ejemplo que he puesto.
EL PERISTILO
Se encontraba en la parte más interna de la casa romana y consistía en un jardín rodeado de un pórtico sostenido por columnas aunque su estructura y dimensiones dependían del terreno que tuviera el propietario. A su alrededor se encontraban las habitaciones más importantes de la casa, como la exedra, una sala espaciosa abierta al pórtico, al triclinio. Las paredes del peristilo como las de las otras habitaciones podían estar adornadas con pinturas y el suelo con mosaicos...
Pompeya es una ciudad rica y con mucha influencia griega , esto se nota en las villas, que son grandes casas situadas en la ciudad en las que se mezclan los estilos y espacios de la casa romana y la griega. Las características que presentan son:
- Cada espacio está dedicado a un solo uso, ya sea comer (triclinium), dormir (cubiculum), reunirese (tablinum)
IMPLUVIUM
TRICLINIUM
Existían tres tipos de casas romanas:
- La casa señorial de tipo pompeyano: es la vivienda particular ocupada normalmente por un solo propietario junto con su familia.
- La insula: Es propia de Ostia y de Roma. Son viviendas de varios pisos construidas para albergar cierto número de familias diferentes.
- La Villa: Es la casa situada en el campo y que podía estar dedicada al recreo: villa urbana; o también a la explotación agrícola o ganadera: villa rústica.
La estructura de la casa pompeyana la tenemos que estudiar haciendo referencia a la casa del Centenario, tal como fue reconstruida en 1903 por Jules-León Chifflot. Se compone de dos grupos: una casa itálica en torno al atrio y una casa helenística en torno a un peristilo. Desde el vestíbulo se llega al atrio por un pasillo estrecho. El atrio cuenta con una abertura (compluvium) hacia la cual descienden las vertientes del tejado. El atrio principal fue durante mucho tiempo lugar de reunión de la familia para las comidas, el trabajo y el descanso. Como no era demasiado cómodo por estar ennegrecido por el humo, pronto tendría únicamente la función de entrada de luz y ventilación. Frente a la entrada se abre una gran habitación (tablinum), flanqueada por dos habitaciones anexas. En otro tiempo, lugar para comer y dormir, no es más que una habitación recepción abierta a un jardín-peristilo en torno al cual se disponen las habitaciones; el comedor cuenta con tres camas (triclinium) y una hermosa sala de recepción.
UNA DE LAS CASAS MÁS COMPLETAS DE POMPEYA
Además de los lechos para dormir existían muebles que completaban el mobiliario; aunque no se han conservado muchos ejemplares debido a que solían ser de materiales perecederos; pero sin embargo todavía se conservan algunos de ellos, como las TABERNAE...
Son habitaciones que se abrían a la calle constituyendo tiendas que el amo de la casa arrienda o donde vende los productos de sus tierras. La mayoría de las veces, a la entrada había un mostrador de albañilería que servía de expositor de la mercancía. En la parte más interior se encontraba la trastienda. En estas tabernas podían venderse desde pan a paños, vino, herramientas... Algunos relieves nos muestran cómo debían ser estas en las diversas partes del imperio.
El interior de las habitaciones de la casa solía estar cuidado. En los mejores aposentos se adornaban las paredes al fresco con diferentes motivos. Por desgracia, la pintura romana ha sufrido daños irreparables en la mayoría de los casos y solo Pompeya constituye una excepción. La condición social del pintor era la de un artesano, aunque los que pintaban sobre tabla tenían un mayor prestigio. Por eso, para clasificar la pintura de Pompeya hay que tener en cuenta cuatro estilos que tienen gran importancia a partir del siglo XIX:
- Estilos de Incrustación: Este estilo de pintura romana se desarrolla desde mediados del s II a.C hasta principios del s.I. a.C, todavía en época republicana. Recibía este nombre porque imitaba la decoración de mármoles que se aplicaban en época helenística. Es un estilo muy colorista, de aspecto muy suntuoso. El muro suele estar divido entres: un zócalo pintado imitando granito, una zona media imitando el mármol y un remate a modo de cornisa realizada en estuco.
Estilo arquitectónico: Se desarrolla durante el s. I a.C en la época de César. Es llamado arquitectónico porque imita no sólo revestimientos sino también arquitecturas. También se lo conoce como "Estilo de prespectiva arquitectónica" porque busca profundidad y perspectiva. Esto consigue dar sensación de mayor amplitud. Suelen dibujarse muchas ventanas, tras las que se pueden ver edificios, y resulta más teatral pues aparece también el paisaje. En definitiva, se trata de una pintura romana que tiende a la disolución
del muro. Es un estilo ya de plena creación romana.
Estilo mixto u ornamental: Se dio entre el 27 a.C hasta la mitad del s I d.C, es decir, durante la época de Augusto y sus sucesores. es un estilo mixto porque en cierta manera es una mezcla de los dos anteriores. es un estilo menos realista y, por lo tanto, más fantástico. Se caracteriza por la representación de elementos ornamentales muy ligeros apareciendo también edificios fantásticos, frisos con niños, elementos vegetales muy estilizados, figuritas de animales, de humanos también pero más pequeñas y delicadas y escenas mitológicas. Los colores son muy intentos. Se dio más en Roma que en Pompeya y destacan las Domus Aúrea de Nerón.
Estilo Ilusionista o Escenográfico:
Se trata de la pintura que se manifiesta desde la época de Nerón, en la primera mitad del siglo I, hasta el final de este mismo siglo. Toma elementos del segundo y tercer estilo. Es el más confuso. En él aparecen también escenas mitológicas, históricas, tiene un gran recargamiento decorativo, aparecen cortinajes y telones y cobra mucho desarrollo el paisaje. También aparece en la Domus Aúrea de Nerón y en la casa de los Vetii en Pompeya. Pueden aparecer arquitecturas para dar un mayor realismo. No hay muchos, pero sí de una gran calidad. Destaca "la villa de los misterios", en Pompeya, de época de Augusto. Después de este siglo, la pintura se limita a grandes masas pictóricas sin delimitar, con búsqueda de efectos claroscuristasa con un gran detallismo en las representaciones, pero después se da una reiteración de los estilos pompeyanos. En el s Ii encontramos muchos mosaicos y revestimientos de mármol sin compartimentación. En época de Adriano se hacen muchos estucados con pinturas geométricas y vegetales y pinturas con un sentido muy pictórico, con colores más lcaros y sfumato.
La villa de los misterios es la villa suburbana más famosa de Pompeya, con vistas al mar, importante por su estructura arquitectónica y por la rica decoración de las paredes y del suelo. Prácticamente todas sus paredes se encuentran decoradas con pinturas. Lo más probable es que esta villa perteneciera a la familia de los Istacidii. Después del terremoto, la vivienda señorial pasó a establecimiento agrícola. Sin embargo su fama se debe sobre todo a la grandiosa decoración pictórica de la sala que podemos ver a continuación. El fresco del segundo estilo representa 29 figuras de tamaño natural y parece simbolizar el rito de iniciación de las esposas en los misterios dionisiacos.
LA PINTURA EN LIBERTAD: Mediante la pintura, el pompeyano se ofrece a sí miso, en su casa, un museo imaginario; este decorado ayuda a penetrar en su universo espiritual y a medir su cultura. Hoy en día no existen secretos en la pintura pompeyana: se obtenía mezclando los colores con una fórmula a base de cal y jabón con cera; se limpiaba seguidamente por medios mecánicos (paleta
de hierro, cilindro de mármol o de vidrio, piedra d epulir) y se lustraba con un paño muy limpio.
LA PANADERÍA
Pertenecía a N. Popidius Priscus. Carece de mostrador y es probable que vendiera pan al por mayor o a través de vendedores ambulantes, los libarii. La piedra lávica es dura y porosa, y no contaminaba la harina con astillas peligrosas para los dientes. Había dos habitaciones al lado del horno que se utilizaban para el almacenamiento del pan recién horneado y como granero. En Pompeya aparecieron 34 panaderías. Los hornos de leña son muy similares a los actuales de las pizzerias napolitanas. El consumo de pan se extendió a partir del siglo II a.C.
LAS NECRÓPOLIS- UBICACIÓN
En la Necrópolis di Porta di Ercolano se pueden recorrer las tumbas de la necrópolis más grande de Pompeya. Entre otras se halla una tumba de toba en forma de asiento semicircular típica de los personajes femeninos importantes perteneciente a Arellia Tertulla. Al lado se halla la tumba de Tertulla y Septumia, así como la de C. Vestorius.
Tras cuatro años de excavaciones en la mítica Pompeya han servido a los arqueólogos de Valencia para constatar lo que ya sabían: Valentia era una proyección de Campania, sobre todo de su urbe más destacada. El yacimiento de l'Almoina -ahora convertido en museo visitable- como otros de otras antiguas ciudades romanas de la costa valenciana guarda los mismos materiales, la misma arquitectura, las mismas costumbres. Las termas, los ritos funerarios pero también el vino, los alimentos, la cerámica con que se cocinaba y la vajilla que servían en la mesa en la Valentia fundacional eran los mismos que pueden verse en las casas pompeyanas. Las viviendas y edificios públicos se construían a imagen y semejanza de los de la
"madre patria", como se aprecia en las pinturas murales que se hallaron.Y es que fueron gentes de la Campania las que poblaron la antigua Valencia. Los trabajos de tantos años en la plaza de l'Almonia ya había sacado a la luz este estrecho vínculo. Las monedas que circulaban en Valentia en el siglo II a I antes de Cristo llevan el nombre de Ahius, uno de los responsables de su cuño, un pompeyano.
El paralelismo llega a tal extremo que enfrente de l'Almoina se encontró un pedazo de teja de revestimiento cerámico con dibujos vegetales polícromos. El experto suizo que la examinó avisó al cabo del tiempo: acaban de enviarle una pieza idéntica. Provenía de un pilar de un templo de Pompeya. Valentia no sólo imitaba las buenas costumbres de la ciudad itálica, también las menos recomendables. Si l'Almoina conserva los esqueletos empalados y torturados de la masacre que, tras una guerra civil, acabó con la ciudad y obligó a refundarla, Pompeya vivía la misma situación, diez años antes.
Las coincidencias se arrastran de la vida a la muerte. También los ritos funerarios que se han encontrado en el subsuelo de Valencia son calcados. La necrópolis de Pompeya no puede ser más parecida a una que se acaba de desenterrar en el área de la calle Sagunto.
El flujo comercial y humano era continuo desde la península italiana hacia la costa mediterránea. En Alicante se encontró un ciudadano pompeyano que murió allí. Tras la época del Imperio, las "sucursales" de Campania o Roma empiezan a "despertar" y el intercambio empieza a ir también en la otra dirección, especialmente el pescado trasladado en ánforas.
"Excavar en Pompeya es como excavar en l'Almoina", asegura Albert Ribera, jefe del servicio de investigaciones arqueológicas del Ayuntamiento de Valencia. Con dos importantes diferencias: el estado de conservación -gracias a la lava- y las dimensiones: Pompeya tiene setenta hectáreas, prácticamente como todo el centro histórico de Valencia. L'Almoina ronda las diez. La ciudad se puede ver entera, sólo sin los tejados de las casas.
Estas historias paralelas forman parte de la exposición Pompeya bajo Pompeya que, hasta el 18 de febrero, puede visitarse en el Museo Arqueológico Municipal de Alicante (MARQ) y que en marzo llegará a Valencia. La muestra, en 200.000 metros cuadrados, recrea la erupción del Vesubio en el año 79 que sepultó Pompeya y otras ciudades vecinas, muestra parte del material arqueológico recuperado y algunas de las pinturas murales y capiteles de las casas de Campania.
La participación de los arqueólogos valencianos comenzó en 2003. Las expediciones han contado con financiación del Ministerio de Cutura.
LA LAVANDERÍA
LA CASA DEL FAUNO
Fue descubierta en 1830. La casa del Fauno representa uno de los más bellos ejemplos de viviendas de la antigua Pompeya. Es una de las domus más grandes y estuvo construida sobre otra domus más antigua. Su primera fase de construcción data del 170-180 a.C con dos atrios, un primer peristilo y un gran hortus. A finales del siglo II se construyó un segundo peristilo. La entrada de la izquierda estaba dedicada al recibimiento y la de la derecha a la parte privada de la casa. El nombre de la casa deriva de un bronce decorativo que representa un fauno danzante; el que hoy en día se puede ver en el atrio de la casa, es una copia del original que se halla en el Museo Arqueológico nacional de Nápoles. En la entrada aún se aprecia la inscripción latina AVE, BIENVENIDO. La decoración pertenece al primer estilo. El diseño de la casa se acerca al modelo de los palacios helenísticos y de la aristocracia romana. Se supone que era la morada de
P. Sila, sobrino del dictador Sila.